El día 24 de Agosto, del año 2019, me fui de viaje con mi familia; yo, mi madre, padre, hermana menor, abuela y abuelo. Tuvimos que ir al aeropuerto de Quito, para recojer a mis abuelos quienes estaban viendo de los Estados Unidos a Ecuador. Después de recojer a mis abuelos nos fuimos a comer en un restaurante en el aeropuerto. La comida era muy rica. Después de comer nos fuimos al apartamento que habíamos arendado para una semana. El apartamento estaba en la playa. Era tan cerca que podías salir del apartamento y al otro lado de la calle estaba la playa, pues cada día que estuvimos ahí yo y mi hermana menor nos fuimos a jugar en el agua. Encontramos muchas conchas que tuvimos que lavar por qué algunas de ellas estaban llenos de arena y otras cosas. El apartamento era un edificio de 8 pisos. También tenía una pésina y jacuzzi en el techo del apartamento. Mientras que estuvimos ahí nos fuimos a ver las ballenas en Puerto López. Y vimos dos ballenas bebés con sus madres y también hubo una ballena gigante que pienso que era el padre de las ballenas bebés. Las olas eran muy grandes pues el barco se movía mucho. Algo que no sabía es que me mareo cuando estoy en un barco. Después de ver a las ballenas el capitán del bote nos llevó a un Arrecife de coral donde pudimos ver muchas pescados y también habían pulpos bebés que nos perseguían en el agua. Después de ir de el Arrecife de coral nos dieron sandía y ceviche para comer; y esto no ayudo con mi mareo que tenía pues no comí nada. Al regresar nos fuimos a comer encocado de pescado y camarón que era muy rico. Nos regresamos al apartamento y nos fuimos a dormir y bañarnos. Al final de cada día estuvimos muy agotados pues dormimos bien. Eso es mi historia y espero que le gustó.
Escrito por Liliana Ortiz